Consejos de supervivencia para un corrector de textos novato

Si hoy empezara mi andadura laboral en la corrección de textos profesional, me gustaría que alguien me advirtiera seriamente de ciertas claves, que no son ni más ni menos que todas aquellas que he ido aprendiendo -algunas a fuerza de palos- en mis años de experiencia como correctora hasta hoy. Quizás no te sirva ninguno, tal vez alguno te valga –así lo espero-; en cualquier caso, estos son mis consejos de supervivencia para un corrector de textos novato (o no):

  1. No dudes en dudar. Empiezas a corregir y solo sabes que no sabes nada. Te darás cuenta enseguida, pero no temas: la duda es una buena compañera de trabajo. Te hace estar más atento, agudiza tu ojo avizor y te enseña a conocer más y mejor la lengua. Dudar es sano. Hazlo sin miedo. No eres peor corrector por ello. Todos los correctores de textos, por muchos años que lleven en la profesión, se encuentran con expresiones o usos lingüísticos que les suscitan cierta inquietud… La lengua es un gigante vivo, cambiante y rebelde, y como tal no es una ciencia exacta fácil de controlar. Duda, acude a las fuentes, comparte tu inquietud con compañeros y, al final, sabrás algo más que antes de dudar.
  2. Mens sana in corpore sano. Si nunca te has preocupado por tu cuerpo, empieza a hacerlo, por el bien de tu espalda, tus cervicales y la circulación de tus piernas. Este trabajo nos obliga a pasar mucho tiempo sentados en la misma postura. Si no practicas ningún deporte, al menos procura levantarte de la silla cada cierto tiempo, darte un paseo cada día, bailar cinco canciones… lo que sea para evitar el sedentarismo que te hará envejecer antes de lo previsto. Pilates o yoga pueden ser tus mejores aliados. Anímate a incorporar a tu rutina diaria una simple tabla de ejercicios y notarás la diferencia.
  3. Sé disciplinado. Lo más probable es que seas autónomo y trabajes desde casa. ¡Saltan las alarmas! ¡Peligro! Si no eres disciplinado, es un magnífico momento para empezar a serlo. Es bueno que tengas una jornada laboral lo más definida posible. Levántate cada día sabiendo a qué hora te sentarás a trabajar. Limita tu tiempo de uso de redes sociales, lectura de prensa y consulta de correo diario para que no interfiera en tu horario de trabajo. Todo está a un clic de ratón y es muy tentador, pero si eres disciplinado en esto, tu productividad se verá beneficiada. Y, por favor, por tu propio bien, quítate el pijama…
  4. Cuídate y defiéndete. Eres autónomo, no un esclavo. Y, sobre todo, eres persona. Necesitas fines de semana libres, necesitas dormir de noche… Sé que hay veces en las que los plazos de entrega te obligan a añadir más horas de las habituales a tu jornada de trabajo, pero, por favor, procura que sea algo excepcional y no lo conviertas en tu rutina. Hay que vivir. Trabajar sin descanso te acabará quemando. Corregir muchas horas seguidas no te convertirá en mejor corrector. Al contrario. No importa lo agobiado que estés. Tu mente necesita descansar. Para unos diez minutos cada hora y media, por ejemplo. Si no lo haces, tu vista cansada te engañará y no obtendrás el resultado que se espera de un buen corrector. Sí, lo sé, también hay que pagar facturas…, pero no vendas tu dignidad profesional, ni siquiera al principio. Trabajar gratis (o casi) es una paradoja que a la larga destruye tu carrera profesional y la del resto de compañeros de oficio. Cuidado con las tarifas que ofreces: dicen más de ti mismo y de tu forma de trabajar de lo que crees.
  5. Crea tu espacio. Si trabajas desde casa, te recomiendo que reserves una zona específica para hacerlo, lo más independiente posible del propio hogar. Parece algo insignificante, pero no lo es. Si mezclas trabajo y vida en un solo lugar, corres el peligro de acabar sintiendo que vives en tu oficina. Te será más fácil desconectar la mente si puedes cerrar una puerta y dejar fuera de tu vista el trabajo pendiente.
  6. Ten cerca a tus aliados. Te has formado convenientemente para ser un buen corrector de textos. Tienes tus títulos académicos colgados en la pared, pero ellos no te ayudarán cuando te enfrentes a un texto a salvar ese vericueto que te ha detenido en la línea 6 de la página 118. Conoce a tus aliados (Diccionario de dudas y dificultades de Manuel Seco; el MELE de Sousa; el diccionario, la ortografía y la gramática de la RAE; los bancos de datos de la Academia como el CORPES XXI, el CREA o el CORDE; la web de Fundéu…) y tenlos a mano cuando trabajes. Te sacarán de más apuros de los que puedas pensar.
  7. No te sientas solo. Los principios pueden ser abrumadores. No olvides que no eres el único corrector del mundo. En UniCo tienes a muchos compañeros unidos, dispuestos a compartir su experiencia y sabiduría contigo. En mis inicios aprendí mucho sobre esta profesión simplemente leyendo el foro de UniCo en el correo de cada día. Mi consejo es que te asocies. Te aseguro que será una buena inversión.
  8. Comunícate. Antes de empezar a corregir un texto, asegúrate de que sabes exactamente qué desea el cliente de ti. Nunca está de más hablar previamente bien con el autor bien con el editor y acordar qué tipo de corrección (ortotipográfica, de estilo, etc.) se va a hacer, si se prefiere seguir un manual de estilo concreto, si se desea mantener la tilde de sólo, etc. Y si tienes alguna duda concreta, no te quedes con ella. Comunícate con tu cliente. Siempre será mejor una consulta a tiempo que intentar adivinar qué se espera de ti.
  9. No te escondas. Cuando alguien te pregunte a qué te dedicas, ármate de paciencia y responde. Deberás explicar una y mil veces qué es un corrector de textos. No te frustres. Muchos acabarán pensando que eres traductor, pero vale la pena insistir y definirnos. Ya lo sé, ni siquiera tenemos epígrafe en el censo de profesionales, pero si queremos que eso cambie, habrá que persistir y seguir contándole al mundo que existimos.
  10. Sé filólogo. Y no me refiero a que seas el poseedor de un título universitario como tal (que, por supuesto, si es así, mucho mejor), sino a que, en el sentido etimológico de la palabra filólogo, seas un amante de las palabras. Ama la lengua, enamórate de ella, interrógala en cada línea, disfruta de tu tiempo a su lado, conoce cada rincón de su anatomía, interésate por su pasado y por su presente, vela por su futuro, obsérvala, anota sus manías, comprende sus vicios y defectos. No creas nunca que la conoces del todo, que la dominas por completo, que eres infalible. Ella siempre va por delante. Se mueve. Está viva. Nunca serás su dueño. Acéptalo y entrégate a ella. Hay libros, cursos de formación, seminarios, conferencias… que deberán ser parte de tu agenda. Si no quieres ser un amante caduco, recíclate siempre que puedas. A fin de cuentas, ella nunca dejará de hacerlo.

 

34 comentarios en “Consejos de supervivencia para un corrector de textos novato

  1. Muchas gracias por estos consejos, Ana. Yo estoy empezando en esto de la corrección y al menos ya me he quitado el pijama XD Creo que lo que peor llevo es la soledad de esta profesión. Es cierto que sigo los foros de UniCo, pero al salir de casa no hay realmente nadie a quien me pueda dirigir para tomar un café y compartir dudas y experiencias. Supongo que con el tiempo ya iré conociendo a colegas.

    Un saludo.

    Le gusta a 1 persona

    1. Te entiendo muy bien. Sobre todo para los que no vivimos en ciudades como Madrid o Barcelona, es difícil salir de esa soledad de la que hablas. A mí las charlas con libreros me han servido mucho. Y siempre están los cafés virtuales de las redes sociales como Twitter en los que he conocido colegas fantásticos que me han servido de consuelo y apoyo en muchas ocasiones, aunque sea en la distancia. Seguro que con el tiempo acabas conociendo a compañeros que andan cerca de ti.

      Gracias por tu comentario. Un saludo😉

      Me gusta

  2. ¡Hola, Ana!
    Muy cierto todo lo que dices. Yo me introduje es la corrección de textos hace unos meses sin ser filóloga y me he ido transformando poco a poco. Aunque siempre corrija textos científicos, la corrección debe invadir mi cerebro.
    Principalmente, como indicas, hay que dudar de todo y consultar hasta la saciedad.

    Una entrada muy interesante 🙂

    Saludos

    Paloma

    Le gusta a 1 persona

    1. Muchas gracias por tu comentario, Paloma. Me gusta eso que dices de que la corrección «debe invadir el cerebro». Estoy muy de acuerdo. Es este un oficio peculiar y más complejo de lo que puede parecer, muy desconocido también.

      Un saludo, compañera.

      Me gusta

  3. Hola, Ana:

    Gracias por estas palabras. Yo soy una de las que está empezando y leer este artículo me ha motivado aún más a continuar en este camino que tanto me apasiona.

    Un saludo desde Mallorca.

    Le gusta a 1 persona

  4. Hola Ana cordial saludo quiero iniciarme como redactora ya que tengo el talento y siento que lo estoy desperdiciando tus consejos valiosos me hacen tomar en cuenta la decisión ya…. Gracias

    Me gusta

  5. Hola Ana..!!
    Geniales tus consejos!
    Te escribo desde Santiago de Chile, donde la Corrección de Textos tiene espacio para crecer…
    Por trabajos anteriores hice edición y corrección de libros, pero ahora quiero dedicarme en forma profesional, por lo que estoy en contacto con varias editoriales.
    ¿Son buenos los cursos de Calamo & Cran?
    Un saludo a la distancia!!
    Fernando

    Me gusta

  6. Hola Ana..!!
    Geniales tus consejos!
    Te escribo desde Santiago de Chile, donde la Corrección de Textos tiene espacio para crecer…
    Por trabajos anteriores hice edición y corrección de libros, pero ahora quiero dedicarme en forma profesional, por lo que estoy en contacto con varias editoriales.
    ¿Son buenos los cursos de Calamo & Cran?
    Un saludo a la distancia!!
    Fernando

    Me gusta

  7. Excelente nota. La leí un poco tarde por la fecha de publicación, pero es justamente lo que necesitaba para llenarme de energías y amar más lo que hago. Muchas gracias por la información.

    Me gusta

  8. Hola, Ana:
    Para también evitar ser un amante agotado (cansado en extremo), tampoco está de más tomarse unas cápsulas de vitamina B (Bedoyecta, complejo B con ácido fólico). Yo he podido lidiar con las jornadas extenuantes tomando este multivitamínico.
    A mí también me gustó el último consejo. Gracias por compartir tu experiencia…

    Me gusta

  9. ¡Hola, Ana! Llego a tu blog redireccionada desde UniCo y tengo que decirte que me encanta. La entrada también me ha gustado mucho. ¿Sabrías decirme como meterme en el foro de UniCo y qué hacer para que me lleguen los correos del foro? Llevo meses de asociada, buscándolo por toda la página pero no me sale por ninguna parte y me siento un poco tonta la verdad.

    ¡Gracias! Un saludo.

    Me gusta

  10. ¡Hola, Ana! Llego a tu blog redireccionada desde UniCo y tengo que decirte que me encanta. La entrada también me ha gustado mucho. ¿Sabrías decirme cómo meterme en el foro de UniCo y qué hacer para que me lleguen los correos del foro? Llevo meses de asociada, buscándolo por toda la página pero no me sale por ninguna parte y me siento un poco tonta la verdad.

    ¡Gracias! Un saludo.

    Me gusta

    1. Hola, Alba. Gracias por tu comentario. Los mensajes del foro llegan al correo que hayas aportado para ello en tu alta. Coméntalo a Administración y seguro que te lo solucionan para que puedas acceder a él. Escribe a administracion@uniondecorrectores.org y ellos te atenderán. Si ves que tardan en responder, es porque ahora estarán liados con las altas y bajas de la asociación en este mes, pero lo harán en cuanto puedan. También puedes probar a contactar con ellos por Twitter o cualquier red social. El foro es de lo mejor de Unico, se aprende mucho de los compañeros. Te recomiendo que no lo dejes pasar. Si no encuentras solución, vuelve a contactar conmigo. Un saludo, compañera.

      Me gusta

Replica a Analis B (F7 soluciones lingüísticas Cancelar la respuesta